jueves, 25 de enero de 2007

Primer día en el Paraíso Patagónico.

Después de una breve estadía en Bariloche (apenas 6 horas), tomé el último micro rumbo a Esquel.
Debo confesar que la ruta que une estas dos ciudades debe ser una de las más bellas del país, no tanto por el estado del pavimento sino por los paisajes que la rodea.
En Esquel me esperaba, como comenté en varias ocaciones, el hostel Casa del Pueblo, que es una casa muy agradable en donde la sala de estar es el lugar elegido por los huéspedes para leer libros, recargar baterías de celulares o cámaras fotográficas, etc.
Ahí mismo conocí a mi primer compañero de viaje, Lucas Rodriguez, 25 años, de Temperley (Bs. As.)
El venía "bajando" desde Bariloche, había estado unos días en El Bolsón y arribaba a Esquel al mismo tiempo que yo. Inmediatamente entablamos relaciones y, debido a su experiencia de mochilero solitario, fue quién me organizó las vacaciones porque, la verdad, si bién yo conocía los lugares que se podían recorrer, no tenía la menor idea de por donde empezar.
Así fue que el primer día entero aquí lo aprovechamos para recorrer la mitad del Parque Nacional Los Alerces (lo realizamos de esta manera porque la excursión completa cuesta $ 170).
Pero esto te lo cuento más adelante, miestras tanto, te dejo unas fotos de la ciudad de Esquel y de la habitación número 2, cama 4 (abajo a la derecha) donde podrás apreciar la calidez del lugar.



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